En la comarca oscura. Lima en la poesía peruana 1950-2000
Acaba de aparecer el volumen En la comarca oscura. Lima en la poesía peruana 1950-2000 (Fondo Editorial de la Universidad de Lima, 2006, 264 pp), a cargo de los críticos (así como poetas y narrador) Luis Fernando Chueca, Carlos López Degregori y José Güich Rodríguez, profesores de la Universidad de Lima. Se trata de un esfuerzo crítico descollante, que integra un total de quince ensayos sobre igual número de poetas, repartidos en proporción equitativa entre cada uno de los autores del libro. El contenido es como sigue. Sobre el 50: "Wáshington Delgado: elegía limeña" (Chueca), "Carlos Germán Belli: nostalgia del linaje humano" (Güich) y "Pablo Guevara: en una de las ciudades más crueles de la tierra" (López Degregori). Sobre el 60: "Luis Hernández: la muerte la basura / el langoy y la locura" (Chueca), "Marco Martos: el infierno donde no se ama" (López Degregori) y "Antonio Cisneros: la higuera solitaria" (Güich). Sobre el 70: "Jorge Pimentel: la ciudad de los relámpagos inacabables" (López Degregori), "Cesáreo Martínez: la sombra del wamani" (Güich) y "Abelardo Sánchez León: mi casa la ciudad se llevó de encuentro" (Chueca). Sobre el 80: "Carmen Ollé: la rebelión de los cuerpos" (Güich), "Domingo de Ramos: el deslumbramiento del horror" (Chueca) y "Róger Santiváñez: el descentramiento y la memoria" (López Degregori). Sobre el 90: "Montserrat Álvarez: una lápida al final del futuro" (López Degregori), "Martín Rodríguez-Gaona: he amado esta ciudad en todas sus formas" (Chueca) y "Miguel Ildefonso: las fronteras infinitas" (Güich). Dicen los autores en la introducción: "Cuando César Moro decidió acompañar con la frase 'Lima la horrible', su poema 'Viaje hacia la noche', no podía suponer que el estado de ánimo frente a la capital peruana que expresaba dicha frase sería compartido por las obras de muchos poetas apenas desde algunos años después, y que llegaría a consagrarse como referencia indiscutible a la ciudad a partir de 1964, cuando Sebastián Salazar Bondy utilizó la expresión como título del libro con el que desmontaba la armazón de la arcadia colonial aún existente en la capital. 'Lima la horrible', sin embargo, continúa hoy sintetizando apropiadamente la actitud de la poesía de la segunda mitad del siglo hacia la ciudad que, a pesar de ser en muchos casos conflictivamente amada, no ha dejado de ser objeto de denuestos y origen de remordimientos. Antes, en tiempos de la Colonia, y aun entrada la República, era todavía posible encontrar en la literatura y en la poesía de nuestro país –como recuerda Javier Sologuren en una breve nota sobre la representación literaria de la ciudad de Lima– los más diversos elogios al lado de acusaciones y burlas; pero es llegado el siglo XX, y sobre todo la segunda mitad de este, que la balanza de referencias y alusiones en la poesía pasa radicalmente a inclinarse del lado de la percepción negativa de Lima, que no dejará ya de ser una 'ciudad inculpada'". También señalan: "Nuestro trabajo propone la lectura de quince poetas peruanos, quienes desde distintas poéticas han recorrido la ciudad de Lima y sus laberintos durante los últimos cincuenta años. El lector atento descubrirá que la recurrida división generacional es artificial, y sesga o empaña una visión integral y comprehensiva de nuestra poesía. Ya se exige un abordaje de otra naturaleza. Como cualquier selección, la nuestra puede ser discutida; sin embargo, creemos que recoge a voces fundamentales en la representación de la capital en el quehacer poético de tan extenso periodo". En la comarca oscura desde ya pasa a formar parte fundamental del estudio sobre la poesía peruana de la segunda mitad del siglo XX.
En la foto: La carátula del libro lleva como ilustración un cuadro del pintor Francisco Guerra-García.
En la foto: La carátula del libro lleva como ilustración un cuadro del pintor Francisco Guerra-García.