zonadenoticias

domingo, marzo 18, 2007

Desde el ChilePoesía

"Nadie entiende nada. Ese fue el ambiente que invadió ayer a la partida de ChilePoesía. Tal como lo había anunciado José María Memet, organizador del evento, un recital en Independencia (la comuna con mayor cantidad de peruanos residentes en el país) sería escenario del vamos oficial de esta gran cita lírica y que tiene a Perú como país invitado de honor. La papelería y los afiches promocionales daban por confirmada la actividad, pero a último minuto, y en un clima de confusión, se suspendió: 'Hoy (ayer) traté de comunicarme toda la tarde con Francisco Romero (director de planificación de la comuna de Independencia); pero no me contestó el teléfono. No entiendo qué pasó, porque se supone que estaba todo listo y a último momento desapareció del mapa. La autocrítica puede partir por haber confiando en personas que no cumplen, y con ello me refiero a las municipalidades de Valparaíso (también se suspendió la lectura programada para hoy) e Independencia, que se supone la forman personas idóneas. No me responden los teléfonos, no sé qué pasa. En todo caso, este traspiés no opaca el inicio de las actividades. Para nosotros, la programación oficial de ChilePoesía parte mañana', agrega Memet. Ante este caótico panorama, la lista de poetas chilenos y peruanos que leería anoche trató de pasar el mal rato con una improvisada y 'bebida' fiesta en el Hotel Parlamento (donde se aloja la mayoría de la de la delegación de vates invitados)". Así informan hoy los periodistas del diario El Mercurio Fernando Cea y Maureen Lennon respecto a "a la caída de la actividad inaugural" del ChilePoesía. Por su parte, Pamela Balboa también en El Mercurio escribe un artículo a propósito de la difundida lectura de poesía en el monitor Huáscar. Sobre este recital, ayer en su columna Disidencias de la página de opinión de La República, Alberto Adrianzén escribe que "sería bueno preguntarles a los poetas peruanos qué hacen recitando en lo que es un botín de guerra, como es el Huáscar". Qué pena que Adrianzén no leyera el pasado viernes Zona de noticias. Por otro lado, tal y como adelanté el viernes, Miguel Ángel Zapata aparece entrevistado hoy por Pedro Pablo Guerrero en la Revista de Libros de El Mercurio. "¿Cómo valora esta invitación a Chile en un momento en que las relaciones bilaterales pasan por un 'momento delicado'? ¿Está de acuerdo con el recital a bordo del Huáscar?", le pregunta Guerrero. A lo que Zapata responde: "Hace años que voy a Chile. Tengo muy buenos amigos allá. Los países se tornan más bellos si sus mujeres son hermosas, y si tienes amigos con quienes brindar, aun mejor. No te olvides que las guerras y los odios son creados por los gobiernos y las clases con poder económico. Luego esto se esparce como veneno por el pueblo ignorante, y se crean las guerras con todas sus atrocidades. Yo no tengo ningún problema en leer a bordo del Huáscar o en el Morro de Arica, pero como peruano sí diría, antes de leer mis poemas, que el Huáscar debe volver al Perú, así como los más de 50 mil libros que se llevaron de la Biblioteca Nacional de Lima durante la ocupación". Nuevamente como adelanté el viernes, en Domingo de La República Rocío Silva Santisteban (en un artículo en el que confunde la nacionalidad de la crítica literaria uruguaya Mabel Moraña) escribe lo siguiente respecto al ChilePoesía y a su negativa personal a participar en el recital del Huáscar: "Es tan fácil ir a Chile a leer poesía. El público es receptivo y enterado: conocen de ritmos y de honestidades. Y gozan, porque saben tanto de la tristeza como de la ironía en un buen poema. Pero, como le he comentado al director de Chile-Poesía, [José] María Memet, no es lo mismo hacerlo en el Monitor Huáscar. No para una peruana. No en un espacio simbólicamente denso, en un lugar donde la herida que ha constituido nuestra nación sigue palpitando, no en el botín de una guerra que, para desgracia nuestra, sigue día a día rememorándose como constitutiva de nuestra identidad. Así que, a pesar de mi intención de cruzar fronteras o, mejor, de borrarlas, no puedo dejar de percibirme a mí misma como parte de esta comunidad nacional afrentada. La intención de este encuentro –'crear nuestro destino como hermanos y vecinos'– es mucho más estimable que mis escrúpulos y, es seguro, que los excelentes colegas que viajen dejarán en claro la fuerza de la poesía peruana en ciudades como Valdivia, Talcahuano o Temuco. No obstante, solo cuando podamos atravesar el desierto sin pensar en las líneas del mar, y cuando no haya barcos que nos recuerden una derrota, ese día miraremos al sur sin rencor".
Este sábado y domingo, al interior del Hotel Parlamento, con esporádicas salidas al centro de la capital, cruzando el río Mapocho que corre frente a la entrada principal del hotel, han sido días de concentración previos al inicio del ChilePoesía. Que yo sepa, nadie "trató de pasar [ningún] mal rato con una improvisada y 'bebida' fiesta". Han sido, sí, días y noches de conversa e intercambio verbal interesantes, lúcidos, divertidos y más. Con el tiempo de nuestro lado. Una concentración que ha otorgado energía especial y renovada a la fuerza viva de la poesía peruana. Una semana que comienza.