A Public Space y la literatura de la violencia en el Perú
La prestigiosa revista A Public Space, publicada en New York, incluye en su reciente número un dossier de cincuenta páginas sobre la denominada literatura de la violencia en el Perú. El especial ha sido preparado por los jóvenes narradores Daniel Alarcón (cuya primera novela saldrá publicada el próximo mes) y Juan Manuel Chávez, ambos a su vez focus editors de la revista. En el dossier se incluye una extensa entrevista con Miguel Gutiérrez, una traducción a cargo de Alarcón de este ensayo de Santiago Roncagliolo, traducciones de cuentos (Oscar Colchado, José de Piérola) y un fragmento de la novela Incendiar la ciudad de Julio Durán, así como una selección de fotos de TAFOS. Una de las preguntas a Gutiérrez (en la revista en su versión en inglés, obviamente), dice así: "Desde sus inicios, ¿en qué cree que ha cambiado o, si cabe, evolucionado en su oficio de escritor?": "Definitivamente he evolucionado de alguna manera. Después de muchos años (y con mucho temor) releí mi primera novela El viejo saurio se retira (1969) y me di cuenta que contiene un serie de temas y obsesiones que reaparecen y se vuelven aspecto central de mis ficciones posteriores. Presumo que así sucede con todo escritor: El primer libro contiene las temáticas de los futuros proyectos literarios. Pero es verdad: aparte de las nuevas experiencias vitales que he tenido, he evolucionado en la medida en que cada día me hice menos ignorante, he leído más libros, he aprendido nuevas técnicas, otros modos de narrar, tretas que tienen ver con la albañilería de la obra. Lo que no ha cambiado es el espíritu, humor y alegría con que escribí El viejo saurio, novela a la que le tengo mucho cariño". Por otra parte, Daniel Alarcón escribe sobre su relación con la literatura de la violencia, e incluye a su vez algunos apuntes sobre el periodísticamente inacabable congreso de narrativa peruana del 2005 en Madrid, y el debate que vino luego. Como para dar que hablar. En suma, un valioso aporte para el mejor conocimiento y difusión de la cultura peruana y de su narrativa en particular. Y es que, tal y como me comenta Alarcón, "Juan Manuel y yo estamos muy orgullosos con el portafolio y queremos que se difunda todo lo posible". Vale.