Antonio Cisneros, Blanca Varela, Jorge Lanata

ANTONIO CISNEROS. Este domingo El Dominical de El Comercio estará dedicado a la obra de Antonio Cisneros. Se publicarán fotos inéditas del poeta, así como ensayos de Eduardo Chirinos y Peter Elmore. Hoy Enrique Planas entrevista al autor en la sección cultural de dicho diario a propósito de su antología poética Propios como ajenos. Una pregunta. "¿Cuando en el prólogo de su antología dice que Comentarios reales no le gusta por ser excesivamente pretencioso, no es algo abusivo?": "Sí, es cierto. Quizá la idea soberbia de un libro que abarque toda la historia del Perú, viendo su lado menos glorioso dentro de un esquema muy brechtiano, estaba bien. Pero el problema está en que yo no tenía los medios técnicos para completar eso. Me queda la sensación de que el libro es muy pretencioso y fallido. Pero quizás exagero. Al comienzo escribes lo que puedes y ya después lo que quieres. Si yo hubiera podido escribir lo que quería, seguramente habría hecho otros poemas".

BLANCA VARELA. La sección cultural de La República informó ayer que la filóloga española Olga Muñoz Carrasco acaba de publicar el libro Sigiloso desvelo con el Fondo Editorial de la PUCP. "En sus 299 páginas, Olga Muñoz (Madrid, 1973) hace un estudio crítico de la obra poética de Varela, desde su primer libro, Ese puerto existe (1959), hasta lo último de su producción literaria plasmado en El falso teclado (2001)", se lee.

JORGE LANATA. José Gabriel Chueca ha entrevistado en Perú 21 a Jorge Lanata, fundador del diario argentino Página 12 y presente en Lima en la Feria del Libro, como di cuenta el miércoles. En Domingo de La República Ángel Paez entrevistó a su vez a Lanata. Una pregunta. "Sus críticos afirman que en su libro [Muertos de amor] hay datos inexactos, que ha maquillado a los personajes y que el relato traiciona la verdad sobre el jefe del Ejército Guerrillero del Pueblo (EGP), el periodista Jorge Ricardo Masetti. ¿Tienen alguna razón?": "Quienes así opinaron en Argentina fueron, en algunos casos, involucrados directos en la historia. Me terminé peleando con los padres de la guerrilla, como me peleé durante la publicación del libro Argentinos con los padres de la historia, o como se han peleado tantos con los padres del tango. El problema de escribir en libertad es que uno se vuelve un tipo molesto. Los protagonistas recién hablaron del asunto cuando los fusilamientos prescribieron, cuando dejaron de ser delito. Treinta años después. No deben estar orgullosos de ello, aunque a veces actúan como si aún lo estuvieran. Siguen siendo igual de autoritarios como hace cuarenta años. ¿Me hubieran fusilado entonces?".

En la foto: Cisneros en la ventana de su oficina del Centro Cultural Inca Garcilaso.