zonadenoticias

lunes, mayo 05, 2008

¿Una narrativa artística peruana?

El narrador Carlos Calderón Fajardo publicó el sábado en Porta 9 un artículo sobre "Casas imaginarias. Templos de la narrativa artística peruana", categoría esta última que utiliza "para diferenciarla de la novela social". ¿Qué tan válida resulta siendo esta distinción? (¿no será similar a la distinción -ya superada- entre poesía pura y poesía social?).
En su texto, Calderón Fajardo señala que "en sus picos estéticos más altos, la narrativa artística peruana lleva en su título la referencia a una casa[. N]ace en el Perú con La casa de cartón (192[8]) de Martín Adán. Tienen que pasar cuarenta años para que este tipo de novela alcance nuevamente un pico estético muy alto con La casa verde (1966) de Mario Vargas Llosa, y luego otros cuarenta años para [que] se plasme otra novela de gran valor artístico: Casa (2004) de Enrique Prochazka".
Otros ejemplos de "narrativa artística peruana" dados por Calderón Fajardo son el libro de cuentos Habitaciones (1992) de Ricardo Sumalavia, el cuento "Búsqueda de casa" de Johann Page (de su libro Los puertos extremos, 2004), y las novelas Casa de Islandia (2004) de Luis Hernán Castañeda y La casa amarilla (2007) de Carlos Rengifo.
Como características fundamentales de esta categoría narrativa menciona al "juego, la parodia, lo lúdico", así como un trabajo enfático en las estructuras (al extremo de que, según sostiene, en La casa verde "la realidad solamente es el decorado").
Además del tópico de la casa (aquí recuerdo el libro La poética del espacio de Gaston Bachelard), otras formas de expresión de esta denominada "narrativa artística peruana" serán abordadas próximamente por Carlos Calderón Fajardo en las siguientes entregas de su columna El hombre que mira el mar.

PD Martes 06: Respecto a las preguntas del primer párrafo, Calderón Fajardo me envía las siguientes líneas: "Creo que esta distinción no es la de puros y sociales que era aplicable a la poesía. Es en relación a una narrativa que pone énfasis en la novela como universo autónomo, a diferencia de la novela social que intenta expresar un sector de la realidad social peruana. Mi novela El huevo de la iguana es una novela social. No estoy diciendo que la novela social no sea artística, estoy utilizando esta distinción con fines estrictamente prácticos. Tampoco digo que la novela artística sea mejor que la social. La intención de ambos tipos de novela es otra, igual que algunas de sus características. Muchos de los escritores llamados sociales, si no casi todos han escrito novelas artísticas, y con grandes libros en ambos tipos de novelas".


En la foto: Enrique Prochazka, autor de la novela Casa; "una casa fantasma, una casa de la imaginación novelesca", tal y como señala Calderón Fajardo.