Alonso Cueto sobre el Premio Planeta
Alonso Cueto dedica su columna de hoy en Perú 21 a Álvaro Pombo, reciente ganador del premio Planeta de novela con su obra La fortuna de Matilda Turpin. Pombo obtuvo el premio Herralde en su primera edición, en 1983, premio que, como se recuerda, Cueto consiguió en su reciente versión. "Amenazó con suicidarse si la gente de la editorial Anagrama no leía sus novelas (luego ganaría el primer Premio Herralde)", señala el autor de El tigre blanco.
A lo largo de su artículo, Cueto va comentando distintas etapas en su vida en las que coincidió con el escritor español en Madrid, desde 1977, cuando "Pombo trabajaba en un banco haciendo horario de oficina", pasando por los años noventa, cuando Pombo mudó su residencia a "la calle Martín de los Heros, acompañado de un gato". Cueto celebra en Pombo sus "novelas magníficas como Donde las mujeres (sin duda la mejor)", y la "prosa densa, ambigua y brillante, la de un magnífico escritor, un gran Planeta".
Quiero comentar que esta columna de Cueto, que le sigue a la anterior dedicada a los probables nombres del Nobel (aparecida el día lunes de la semana pasada, el Nobel se entregó ese jueves), me deja un poco confundido en contraste con su opinión de Orhan Pamuk, del cual se refirió entonces simplemente como "un escritor interesante", el cual "no tiene, sin embargo, una obra tan completa e integrada como la de otros eternos postulantes: Philip Roth, Paul Auster o Mario Vargas Llosa". El pasado viernes, en El Comercio, Cueto dijo un poco más, que con el Nobel de Literatura otorgado a Pamuk se "premia una obra consistente y densa, aunque también una trayectoria moral" ("aunque también", no "y ademas" o "y también"). "Un muy buen Nobel", sí, pero, insistía, "había otros autores con obras más orgánicas (Auster, Vargas Llosa, Noteboom, Roth)".
Entiendo perfectamente que Cueto se refería de Pamuk con relación a esos "otros eternos postulantes" al Nobel, y que hoy celebra un premio conseguido por Pombo al que se postula de manera anónima con una obra particular. Pero igual me queda la impresión de que, si Pombo resultara el próximo candidato español al Nobel (su nombre suele estar voceado), y lo obtuviera, Cueto celebraría dicha premiación con algo más de entusiasmo que el mostrado respecto al Nobel de Literatura obtenido por Pamuk. Es una impresión nada más.
En la foto: Alonso Cueto considera a Pamuk "un escritor interesante" con "una obra consistente y densa" y a Pombo "un magnífico escritor" con "una prosa densa, ambigua y brillante".
A lo largo de su artículo, Cueto va comentando distintas etapas en su vida en las que coincidió con el escritor español en Madrid, desde 1977, cuando "Pombo trabajaba en un banco haciendo horario de oficina", pasando por los años noventa, cuando Pombo mudó su residencia a "la calle Martín de los Heros, acompañado de un gato". Cueto celebra en Pombo sus "novelas magníficas como Donde las mujeres (sin duda la mejor)", y la "prosa densa, ambigua y brillante, la de un magnífico escritor, un gran Planeta".
Quiero comentar que esta columna de Cueto, que le sigue a la anterior dedicada a los probables nombres del Nobel (aparecida el día lunes de la semana pasada, el Nobel se entregó ese jueves), me deja un poco confundido en contraste con su opinión de Orhan Pamuk, del cual se refirió entonces simplemente como "un escritor interesante", el cual "no tiene, sin embargo, una obra tan completa e integrada como la de otros eternos postulantes: Philip Roth, Paul Auster o Mario Vargas Llosa". El pasado viernes, en El Comercio, Cueto dijo un poco más, que con el Nobel de Literatura otorgado a Pamuk se "premia una obra consistente y densa, aunque también una trayectoria moral" ("aunque también", no "y ademas" o "y también"). "Un muy buen Nobel", sí, pero, insistía, "había otros autores con obras más orgánicas (Auster, Vargas Llosa, Noteboom, Roth)".
Entiendo perfectamente que Cueto se refería de Pamuk con relación a esos "otros eternos postulantes" al Nobel, y que hoy celebra un premio conseguido por Pombo al que se postula de manera anónima con una obra particular. Pero igual me queda la impresión de que, si Pombo resultara el próximo candidato español al Nobel (su nombre suele estar voceado), y lo obtuviera, Cueto celebraría dicha premiación con algo más de entusiasmo que el mostrado respecto al Nobel de Literatura obtenido por Pamuk. Es una impresión nada más.
En la foto: Alonso Cueto considera a Pamuk "un escritor interesante" con "una obra consistente y densa" y a Pombo "un magnífico escritor" con "una prosa densa, ambigua y brillante".