La activación de la memoria
En un post anterior hice referencia en una postdata a un artículo de Giovanna Pollarolo sobre el documental Los niños perdidos del franquismo (2002), de los periodistas y cineastas catalanes Montse Armengoul y Ricardo Belis (una lástima que el Centro Cultural de España en Lima no lo incluyera en su IV Festival de Cine Español). El tema tiene que ver con la activación de la memoria histórica con relación a sucesos violentos y dolorosos en la historia de los países. Hoy el dossier del suplemento Babelia del diario El País está estrechamente relacionado al tema. Así, Santos Juliá escribe sobre las "Trampas de la memoria" y dice: "Ese echar al olvido no era amnesia ni ignorancia, sino resultado de la decisión política de que el pasado no interfiriera en la voluntad de abrir un futuro que librara a España de la dictadura por medio de la clausura de la Guerra Civil, por su conversión en historia, como escribían Enrique Tierno y Dionisio Ridruejo. En esa decisión participaron gentes que venían del fascismo y del comunismo, del republicanismo y del monarquismo, de los vencedores y de los vencidos. Veinte años, no más, habían transcurrido desde las grandes matanzas en las que habían sucumbido padres, familiares, amigos de quienes ahora decidían liquidar aquella nefasta herencia poniendo a buen recaudo su memoria".
Sandra Ellegiers se ocupa de "La culpa como fenómeno social" con respcto a Alemania: "Ningún intelectual, ni escritor ni instancia moral en Alemania se escapa de la larga y oscurísima sombra que dejó Hitler y el sistema destructor que creó con el apoyo de la mayoría del pueblo alemán. Los años entre 1933 y 1945 aparecen hasta el día de hoy en el horizonte de los debates intelectuales del país y amenazan le integridad de quienes eran lo suficientemente mayores en su momento para tener conciencia de la crueldad criminal del nazismo y exiliarse, como Sebastian Haffner o Thomas Mann, o sumarse al régimen, como lo hizo Ernst Jünger o el entonces jovencísimo Günter Grass. Las palabras de Theodor A. Adorno a comienzos de los años cincuenta, 'es bárbaro escribir un poema después de Auschwitz', continúan vigentes y también las de Martin Walser, ayudante de cañón durante la II Guerra Mundial, cuando dijo en 1999 que el pasado nazi se utilizaba durante conflictos sociales de 'clave moral' para asegurarse una posición que impide argumentar en contra en los combates diarios de opiniones".
José-Carlos Mainer publica un reportaje titulado "Cadáveres en el armario", y Miguel Ángel Villena plantea la responsabilidad de los intelectuales "Entre el miedo y la impunidad". Mientras que Enric González escribe sobre "La ambigüedad italiana". "Las relaciones entre los escritores y el régimen de Mussolini respondieron a ejemplos de muy distintas características. No obstante, las evoluciones contradictorias o vacilantes marcaron las biografías de muchos intelectuales italianos entre 1922 y 1945", se lee.
HANNAH ARENDT
Por su parte, Luis Fernando Moreno Claros rinde un merecido homenaje a "La filósofa enamorada" Hannah Arendt, de quien hoy se cumplen cien años de su nacimiento. Una breve semblanza de la filósofa germano-estadounidense: "Judía y alemana, fue alumna y amante de Heidegger. Pasó por un campo de internamiento en Francia cuando huía de la persecución nazi camino de Estados Unidos. Allí escribiría títulos clásicos de la ciencia política como Los orígenes del totalitarismo o La condición humana. Después de asisitir en Jerusalén al jucio del jerarca de la SS Adolf Eichmann, acuñó un concepto que hoy sigue siendo polémico: la banalidad del mal". Finalmente, J. Rodríguez Marcos pasa revista a los libros más importantes de la autora.
El diario El Comercio da cuenta también de este aniversario de Arendt.
PD: Arendt, cien años. Sobre la revolución es otro de sus títulos.
Sandra Ellegiers se ocupa de "La culpa como fenómeno social" con respcto a Alemania: "Ningún intelectual, ni escritor ni instancia moral en Alemania se escapa de la larga y oscurísima sombra que dejó Hitler y el sistema destructor que creó con el apoyo de la mayoría del pueblo alemán. Los años entre 1933 y 1945 aparecen hasta el día de hoy en el horizonte de los debates intelectuales del país y amenazan le integridad de quienes eran lo suficientemente mayores en su momento para tener conciencia de la crueldad criminal del nazismo y exiliarse, como Sebastian Haffner o Thomas Mann, o sumarse al régimen, como lo hizo Ernst Jünger o el entonces jovencísimo Günter Grass. Las palabras de Theodor A. Adorno a comienzos de los años cincuenta, 'es bárbaro escribir un poema después de Auschwitz', continúan vigentes y también las de Martin Walser, ayudante de cañón durante la II Guerra Mundial, cuando dijo en 1999 que el pasado nazi se utilizaba durante conflictos sociales de 'clave moral' para asegurarse una posición que impide argumentar en contra en los combates diarios de opiniones".
José-Carlos Mainer publica un reportaje titulado "Cadáveres en el armario", y Miguel Ángel Villena plantea la responsabilidad de los intelectuales "Entre el miedo y la impunidad". Mientras que Enric González escribe sobre "La ambigüedad italiana". "Las relaciones entre los escritores y el régimen de Mussolini respondieron a ejemplos de muy distintas características. No obstante, las evoluciones contradictorias o vacilantes marcaron las biografías de muchos intelectuales italianos entre 1922 y 1945", se lee.
HANNAH ARENDT
Por su parte, Luis Fernando Moreno Claros rinde un merecido homenaje a "La filósofa enamorada" Hannah Arendt, de quien hoy se cumplen cien años de su nacimiento. Una breve semblanza de la filósofa germano-estadounidense: "Judía y alemana, fue alumna y amante de Heidegger. Pasó por un campo de internamiento en Francia cuando huía de la persecución nazi camino de Estados Unidos. Allí escribiría títulos clásicos de la ciencia política como Los orígenes del totalitarismo o La condición humana. Después de asisitir en Jerusalén al jucio del jerarca de la SS Adolf Eichmann, acuñó un concepto que hoy sigue siendo polémico: la banalidad del mal". Finalmente, J. Rodríguez Marcos pasa revista a los libros más importantes de la autora.
El diario El Comercio da cuenta también de este aniversario de Arendt.
PD: Arendt, cien años. Sobre la revolución es otro de sus títulos.