Breves
LAS MORADAS. El narrador Carlos Calderón Fajardo publica hoy en el weblog Bitácora de El Hablador el artículo "Las Moradas: 60 años de su creación". "En el Perú se viene produciendo una cultura de un nivel creativo muy alto desde mucho tiempo atrás, y lo que hacemos hoy es producto de notables esfuerzos anteriores. No podemos comprendernos a nosotros mismos, ni orientarnos con un horizonte seguro para lograr lo que pretendemos si no regresamos a ciertos acontecimientos cruciales. La cultura es eso: volver a lo que fue importante en el pasado para expresarnos en el presente y proyectarnos al futuro. Hace 60 años, un mes de mayo de 1947, salió a la luz el primer número de la revista Las Moradas, creada y dirigida por el poeta Emilio Adolfo Westphalen. Su primer número tuvo como miembros del Comité de Redacción a Carlos Cueto Fernandini, Jorge Eduardo Eielson, Enrique Iturriaga, Fernando Shawb y Fernando de Szyszlo, con ilustraciones de Ricardo Grau, Klee, Sérvulo, Carlos Quíspez de Asín, y viñetas de Szyslo y la contracarátula de Judith Westphalen. Cada ejemplar se vendió a tres soles, pero el contenido de la revista es de un valor incalculable", afirma el autor de Historias de verdugos.
LIBRO DE CÉSAR HILDEBRANDT. Carlos Cabanillas entrevista en la edición de esta semana de Caretas (Nº 1976) a César Hildebrandt con motivo de la publicación (vía Planeta) de su libro de memorias televisivas La cámara del terror, del cual se ofrece un fragmento.
PLAGIO CONTRA ÁGREDA. Hoy en la sección cultural de El Peruano Ernesto Carlín Gereda publica el artículo "En Colombia plagian a crítico Javier Ágreda".
NUEVO WEBLOG. La poeta Cecilia Podestá se lanza al ruedo de los weblogs vía Muro de carne. Suerte.
BEATRIZ SARLO A PROPÓSITO DEL GOL DE MESSI. Vía El blog del Morsa me entero de un artículo de Beatriz Sarlo sobre "Los verdaderos héroes de nuestro tiempo" publicado este domingo en Clarín. "Por supuesto, nadie piensa en plata cuando ve la repetición del gol de Maradona o de Messi. En la breve intensidad de ese momento se disuelve el dinero. Y sin embargo, el dinero está del otro lado, presente aunque vuelto invisible por la astucia, la destreza y la gracia de una jugada. El dinero ha convertido al deporte en un fenómeno planetario y a los héroes deportivos los ha colocado en la mayor proximidad que pueda pensarse respecto de dioses terrenales. Sin dinero no hay televisión (y viceversa). Sin televisión no hay planeta. Excepto en regiones, como Irak o Israel, donde hay guerra, invasión o enfrentamientos religiosos, o en algunos países que atraviesan procesos complejos de transformaciones encabezados por dirigentes carismáticos, o equivocaciones masivas como la respuesta popular a la aventura militar de la dictadura en las Malvinas, el patriotismo deportivo es la forma suprema, más penetrante y más colectiva del patriotismo. Nada nos arranca de la inmediatez y el encierro como una victoria nacional en fútbol y ningún otro mérito será tan celebrado como el que demostraron en esa victoria los deportistas. En el mundo de las celebrities ellos tienen, por eso, un lugar aparte, sobre el que no hay división. Son héroes contemporáneos precisamente por la unanimidad a la cual es difícil sustraerse porque no se trata de una actividad cualquiera, sino de aquella que representa, en un mismo plano, a la gente concreta y a la nación simbólica. El que no está allí es un antipatria, un desviado indiferente o un intelectual pedante y peligrosamente crítico", sostiene la crítica argentina.
En la foto: Emilio Adolfo Westphalen.